En la Plaza de Armas de la ciudad de Mulchén, aquí en Chile, conversando con un matrimonio de cierta edad, les pregunté, "Y para ustedes ¿qué es un cristiano?"
Ambos contestaron enérgicamente, hablando a la misma vez: "Somos todos cristianos. Todos somos hijos de Dios. Hay que hacer la voluntad de Dios no más, yendo a la iglesia, ayudando al prójimo y no haciendo mal a nadie y así seremos buenos cristianos."
Ante esta vehemente reacción, les dije: "¿Y qué dice la Biblia al respecto?" Lamentablemente no obtuve respuesta.